Se trata de la firma Sero Electric, de Villa Luzuriaga, una ciudad argentina del partido de La Matanza. Si bien se está habilitando en distintos municipios, consideran que lo más importante es que “salga a nivel nacional” para beneficiar “el mercado y el rubro”.

Para que el sector automotor de vehículos alimentados por energía eléctrica cobre nuevo impulso hay un obstáculo a sortear: la necesidad de contar con una normativa que habilite la circulación de este tipo de unidades en todo el país.

Así lo indicó tiempo atrás Guadalupe Naya, directora de marketing de Sero Electric, la empresa matancera que produce el único auto eléctrico nacional, a El1 Digital.

“El primer municipio que accedió fue Godoy Cruz, en la provincia de Mendoza; compraron vehículos y, por eso, implementaron una reglamentación dentro del municipio. Después, se sumó Morón, entre otros distritos, que los utiliza para patrullaje de tránsito”, puntualizó la mujer.

De todos modos, observó: “si bien sirve que se vaya autorizando a nivel municipal, lo más importante es que salga a nivel nacional. Ahí, se van a beneficiar el mercado y el rubro”.

Por tanto, se señaló que aun falta camino por recorrer: “En primer lugar, necesitamos que salga la reglamentación para poder hacer circular el vehículo y homologar el producto porque todavía no está autorizado. Recién cuando salga la homologación, vamos a poder gozar del beneficio de reducción de aranceles”, advirtió Naya al respecto.

La bonaerense se refería así al decreto 331/2017 que firmó el gobierno en mayo último para reducir el arancel a entre el cero y cinco por ciento para la importación de autos propulsados con energía eléctrica, y alcanza a las compañías que fabrican vehículos de cualquier tipo en la Argentina, por lo que las empresas que sean únicamente importadoras pagarán el cien por ciento de los aranceles.

Además, para que el impulso a este tipo de vehículos sea completo, los fabricantes vienen reclamando la instalación de puestos de carga, principalmente, en estaciones de servicio. Es que los modelos importados requieren un tipo de conector especial para recargar las baterías, lo que le daría mayores posibilidades de expansión al uso de autos eléctricos.

El auto argentino cuenta con una ventaja importante en ese aspecto: “Nuestro vehículo se carga como un celular, en un tomacorriente doméstico, por lo cual se puede cargar en cualquier lado, como el garaje de una casa. En Europa, los vehículos tienen otro tipo de batería”, detallaron desde Sero Electric.

De acuerdo con los cálculos de la Asociación Argentina de Vehículos Eléctricos y Alternativos (AAVEA), un vehículo en la Ciudad recorre unos 55 kilómetros por día, poco más de un tercio de los 155 kilómetros que ofrecen de autonomía, en promedio, los vehículos eléctricos. Además, no necesitan cambio de filtros ni de aceite y se reduce radicalmente los costos, en función de los precios de los combustibles. No obstante, el aporte más importante -arguyen- es la reducción de la contaminación ambiental. (InfoGEI) Ga

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