La tecnología tiene varios años de desarrollo en Argentina, pero últimamente está comenzando a emerger como foco de interés y alternativa productiva, ya sea en grandes plantaciones comerciales, como otras más pequeñas que la ven como una alternativa a la falta del suelo. INTA San Pedro tiene trayectoria de trabajo en el tema, y propuso una jornada para comenzar a entrelazar una red de interesados en la temática.
Aportes para el crecimiento, la equidad y la sustentabilidad del territorio diversificado de los partidos costeros de San Pedro y Baradero.
Para un país con grandes extensiones geográficas como Argentina, una tecnología basada en el no uso de suelo presenta varias dudas. Sin embargo, a nivel productores es tan convocante, que para la jornada realizada en la Estación Experimental Agropecuaria San Pedro, hubo que cerrar la inscripción un mes antes para poder recibir cómodamente a los interesados. Participaron 150 personas de 15 provincias de Argentina, que desde organismos públicos, sistema educativo y sobre todo emprendimientos privados, manifestaron interés en implementarla para sus producciones.
Osvaldo Valenzuela explicó que las demandas que llegan al INTA son de tres tipos sobre esta tecnología: cuando no hay suelos, por ejemplo por rellenos de nuevos complejos habitacionales; cuando el suelo está muy degradado por el mal uso del riego, incluso en lugares donde está contaminado; y también cuando hay problemas de arrendamiento y de escasez en la disponibilidad de tierras en los cinturones hortícolas de las grandes ciudades. Con un mapa del país que identificaba las provincias presentes, José Czepulis contó que «la idea de esta charla es poder generar una red de trabajo en cultivos hidropónicos», y explicó que reconocerse parte de una red puede dar sustentabilidad para continuar con este desarrollo tecnológico en Argentina. Por esto, invitó a los presentes a sumarse a este trabajo colectivo.
El paso a paso de la jornada
En el comienzo, tras la bienvenida del Director de la Unidad, Armando Constantino, los presentes pudieron escuchar a Adolfo Amma, investigador retirado del INTA, y principal responsable de la implementación de la tecnología en nuestro país. Amma realizó un repaso por la experiencia, y el vínculo con el organismo internacional JICA, de Japón, a partir del cuál se realizaron las primeras experiencias en San Pedro y que durante muchos años fueron difundidas desde la EEA San Pedro.
La convocatoria propuso la confluencia de distintos disertantes y experiencias. Por un lado la tecnología de punta en hidroponia que propone una empresa española que provee a distintos países del mundo sistemas que son verdaderas fábricas de hortalizas. Para esto estuvo Antonio Oliva, que presentó el sistema hidropónico recirculante NGS, la innovación tecnológica aplicada a la agricultura intensiva, desde la Empresa New Grow System. La disertación incluyó un repaso por el sistema que vienen desarrollando y adecuando según los intereses de sus clientes, desde opciones más sencillas hasta sistemas más avanzados que permiten tener plantas en altura regulable para facilitar la cosecha mientras se asegura que el 100% del invernáculo esté cubierto de plantas sin pasillos.
La segunda presentación estuvo a cargo de Raúl Nicolosi, de la Dirección Nacional de Fruticultura y Horticultura del Ministerio de Agroindustria de la Nación, quien hizo un repaso por los orígenes de la tecnología, los fundamentos de su implementación, y un extenso repaso de los casos en Argentina que ya están usando la tecnología con sus experiencias. Sobre el final, presentó las políticas públicas vinculadas con la temática, principalmente una destinada a incrementar el consumo de frutas y hortalizas, como pilar de sostén para el crecimiento del sector productivo. También habló de la implementación de la normativa de Buenas Prácticas Agrícolas.
Luego siguieron los anfitriones locales, Osvaldo Valenzuela y José Czepulis, quienes respectivamente se encargaron de abordar la perspectiva de por qué los cultivos hidropónicos son sustentables, y luego el manejo del pH, CE y oxigenación en sistemas hidropónicos en solución nutritiva. Finalmente el cierre fue mostrando experiencias. En salón, el equipo de la Escuela Agrotécnica Arturo Figueroa Salas, abordó la hidroponia en la educación, explicando la experiencia que desde 2017 llevan adelante junto al INTA San Pedro.
Después de un corte, el grupo visitó los ensayos en la Estación Experimental, donde pudieron ver cultivos de gerbera y distintas hortalizas con distintos sistemas. En esa misma instancia, pudieron conocer a algunos proveedores de insumos que interactúan con el INTA en las experiencias que se llevan adelante que permiten realizar distintas pruebas. Luego, el grupo se trasladó al paraje Tablas para conocer la empresa familiar de Fernando y Miguel Corvalán, donde los productores realizaron una reconversión del sistema tradicional para virarlo a esta tecnología.
Los momentos de intercambio fueron intensos, solo interrumpidos por los tiempos ajustados del programa que propuso realizar una inmersión profunda en la tecnología a fin de ir proyectando entre los interesados un trabajo en red. Desde las aclaraciones necesarias sobre alguna técnica implementada, los costos de implementación, la posibilidad de evitar los productos de síntesis química o la posibilidad de financiamiento para comenzar proyectos de este tipo.
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