Graciela Borges habló esta tarde en “Animate a decirlo”, el programa de Marcela Feudale por La Radio FM 92.3

“Primero lo tomé como una mala película, en broma, y después no he podido dejar de reflexionar sobre lo poco que conoce uno a la gente”, comentó la actriz, sobre las denuncias que hizo su ex nuera, la modelo Consuelo Lough Perdomo, quien le inició demanda de divorcio a Juan Cruz Bordeu, donde lo trata de “golpeador” y “maltratador”.

“Si hay algo que sé, es el afecto que tuvo por esta chica que ha estado casada nada más que nueve o diez meses con Juan Cruz, y a quien tuve un cariño enorme, dijo Borges. “Mi hijo no es un chico perfecto. Que digan que es homosexual, me hace gracia, pero lo que me molestó es que se diga que es violento. Si hay un ser que no es violento en este mundo, desde chiquito, es Juan Cruz, argumentó la diva.

“Hay que ver que le pasa a la gente, que angustia, que tristeza, que resentimiento le da, que se volvió a casar, tiene una hijita… qué se yo que le pasa”, agregó.

“No quiero juzgarla porque la verdad que el amor no se cambia rápidamente, yo a esta chica la quise mucho, hace un mes comí con su familia en una mesa al lado, nos hemos dado un abrazo y un beso, les he dicho cuánto la quería… Es extraño todo este movimiento, es extraño. ¿Viste cuando hay un rulo que te falta? Además, me dio gracia que diga que la encierran. ¡No hay llaves en la casa de Juan Cruz!”, continúa contando Borges, enojada. “Del que está hablando es otra persona”, concluye.

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